Películas estáticas sin titular.


Reseña Fotográfica sobre Cindy Sherman: Untiltled Film Stills.


En Diciembre de 1995 el Museo de Arte Moderno de Nueva York adquirió entre sus múltiples colecciones las 69 piezas de la colección ‘’Completed Untitled Film Stills’’ de la fotógrafa y cineasta Cindy Sherman por una cifra aproximada de 1 millón de dólares, la colección se exhibió una sola vez y ha sido puesta a disposición de una nueva exposición por el MoMA en el año 2012 viajando por San Francisco y Minneapolis.
Cindy Sherman nació en Nueva York el 19 de enero de 1954, entró a la Universidad de Buffalo donde estudió artes visuales, comenzando con la pintura se llevó muchas desilusiones y después de meticulosamente copiar obras de otros autores, se encontró con la fotografía y su espectro de posibilidades se abrió ampliamente, aquí podía usar su tiempo en una idea personal. Para Sherman su objeto de inspiración es la cultura pop, no como un objeto ni un material, sino un nuevo vocabulario de donde extrae un carácter de ready-made que ella sólo utiliza cuando se identifica en un personaje. Sus fotografías de esta particular colección se caracterizan por ser en blanco y negro, mostrar diferentes protagonistas mujeres en diferentes escenarios y contextos. Cada una representa un rol estereotipado de la mujer contemporánea y con eso la autora busca desaparecer de la imagen para convertirse en la caracterización de una de sus fotografías. Ella afirma que sus obras no son autorretratos con disfraces y que la actuación dentro de la fotografía no es pensada, es espontánea. Lo especial en la obra de Cindy es su capacidad de montar la fotografía con sus propios medios y métodos, ella es la encargada de maquillaje, vestuario, peinado, iluminación, escenografía, fotografía, edición y por supuesto modelo de la misma.
La serie está compuesta por fotografías de 8 ½ x 11 pulgadas cada una con un simple marco negro alrededor. Éstas son fotografías tomadas entre el año 1977 y 1980, después de este período la autora comienza a experimentar con la fotografía a color y sus contrastes. La serie tiene un acercamiento estilístico con relación al cine italiano neorrealista y al cine noiro negro americano y francés de las décadas 40, 50 y 60. Todas las fotografías constan de números ya que la artista quiso evadir los títulos para preservar la ambigüedad de sus obras. Todas las mujeres que personifica son solitarias heroínas de un tiempo específico, situado en los Estados Unidos de la época de post guerra. Las primeras seis piezas fotográficas tienen la particularidad de estar fuera de foco y tienen relación a la misma actriz rubia en diferentes lugares y actividades. Su trabajo estimula al espectador a verse reflejado en ella. Lo que quiere lograr es que el público que vea las imágenes encuentre algo de ellos mismos en vez de a ella. Su intención es que cualquiera se pueda relacionar con sus fotos sin saber de arte contemporáneo.
En esta primera imagen titulada ‘’Untitled Film Stills # 3’’ del año 1977, la fotógrafa nos muestra una típica ama de casa en una cocina. Trae puesto un delantal y se infiere su acto de limpiar la cocina o lavar los platos. La mujer rubia y acinturada tiene una cara  de complicidad, algo la perturba, un secreto, una angustia, desvía levemente la mirada por sobre su hombro izquierdo hacia atrás. En esta fotografía se puede ver el estereotipo de la mujer sumisa americana dedicada al hogar, al cuidado de los hijos y complacer a su esposo, que se puede apreciar con mucha precisión en la serie televisiva Madmen, vacila con su posición y su mirada, apoyada sobre el estante, algo le preocupa. 
Nombre: Untitled Film Stills # 3
Año: 1977
Lugar: MoMA, USA
Técnica: Fotografía Argéntica en blanco y negro. 

La segunda fotografía, es la #54, encontramos una mujer caminando por la calle solitaria cubriéndose del frío con su abrigo, la calle está oscura, hay poca iluminación se le ve a ella casi en medio del encuadre que le llega hasta los tobillos. Su apariencia hace recordar una estética a lo Marilyn Monroecon su pelo corto, rubio y ese brushingque lo hace esponjoso y voluminoso. Brillante platinado sobre sale por contraste de la negra fotografía. Sus ropas son simples, ropa de trabajo, un traje de dos piezas, un cinturón, un abrigo, su cartera de cuero sobre el hombro. 
En la tercerafotografía, #15 de 1978, nos muestra una mujer con aspecto de bailarina, con poca ropa está sentada en el borde de una ventana, con zapatos de taco alto, usa medias cortas, pantalones cortos, una blusa y cinturón, lleva una cadena de donde cuelga una cruz que se desliza por su escote. Tiene la pierna izquierda flexionada y la otra sostiene su postura en el piso, su mano izquierda sobre la pierna, mientras que la otra se apoya en el muro de ladrillos. En el encuadre, aparece además una silla antigua pero en el medio de la fotografía figura ella, la protagonista, con su cabello recién peinado, maquillada, mirando por la ventana, esperando a alguien. ¿Un amor? 
La cuarta fotografía es la #13, la protagonista, esta vez está en una biblioteca, simula una estudiante con blusa blanca, falda de cuadros, pelo rubio y flequillo y un cintillo blanco. Su postura es evidente, se empina rigurosamente para sacar un libro en lo alto de un librero, su mirada está enfocada en otra cosa, mucho menos en el libro que sostiene sacándolo de su lugar. Está mirando hacia arriba sus ojos se distraen y su cara se eleva sobre su hombro izquierdo.
Finalmente, la  #2, nos muestra a la femme fatalesituada en un baño mirándose en el espejo del lavamanos, tapada sólo con una toalla, está de espaldas y genera una pose delicada con su mano derecha, a su vez sosteniendo la toalla con la otra mano. Su cabello corto no disimula ser una peluca con mucho volumen, su maquillaje es simple sólo en sus ojos. Su postura determina que el interés es precisa y únicamente ella, no existe nada en el mundo en ese momento más que ese instante de vanidad.  





Entonces se produce un quiebre en toda la armonía de la America´s sweetheartque normalmente intenta guardar las apariencias en vez de afrontar la realidad. Cindy Sherman no se consideraba a sí misma como una artista feminista, pero dentro de sus obras se puede ver un intento de subversión con respecto a la cultura establecida y a los parámetros de la cultura machista que existía entre las décadas del 40 y 60 y la relación que tienen con los parámetros culturales, de belleza, aceptación y liberación en el contexto de Estados Unidos en el comienzo de los años 80.






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