Roberto Matta
(Roberto Sebastián Antonio Matta Echaurren)
(Stgo. De Chile 11 de nov. De 1911- Citavecchia, Italia , 23 de nov. 2002).
Allende de la muerte a la vida, Pasaje de la muerte a la vida. 1973-1974
("Pasage de la mort á la vie”)
210 x 390 cm
Pintura al óleo sobre tela
Donada por la viuda Germana Matta al Museo Salvador Allende de Santiago de Chile entre 2007-2008. Corresponde a la época tras el golpe militar el 11 de septiembre de 1973.
Museo de la Solidaridad Salvador Allende
Matta fue un pintor, arquitecto, filósofo y poeta conocido por ser uno de los representantes más álgidos del surrealismo en Chile, a quien el gobierno le otorga el Premio Nacional de las Artes en 1990 y quien también recibe el Premio Príncipe de Asturias de las Artes en 1992.
Estudió en el colegio de los Sagrados Corazones de Santiago donde se empezó a destacar con sus notas en dibujo y por su caligrafía.
Durante la década de los años 30 realiza el servicio militar en Viña del Mar reprimiendo su beta artística y lo cual produce en él un fuerte sentimiento anti-militar.
Estudió en la Escuela de Arquitectura de la Universidad Católica de Chile siendo su tesis de título un proyecto titulado “La legión de las religiones”. Asistió a talleres libres en la Escuela de Bellas Artes de la Universidad de Chile.
Cuando se titula viaja a Europa en un barco mercante en 1935, durante sus estancia en Portugal conoce a Gabriela Mistral la cual era cónsul en ese país. Mientras se encontraba en París trabajó directamente con el arquitecto Le Corbusier en su taller personal, su relación con el arquitecto francés estuvo cargada de mucha admiración y de una particular rivalidad.
En 1936 se instaló en Londres donde trabajó con los arquitectos Walter Gropius y Moholy-Nagy y se relacionó con artistas e intelectuales británicos.
Mientras se encontraba en Europa Matta conoció también a prominentes artistas contemporáneos de vanguardia como Pablo Picasso, Salvador Dalí, René Magritte, André Bretón y Marcel Duchamp, muchos de ellos formaban parte del movimiento surrealista en París.
En 1937 define su vocación artística al conocer al artista británico Gordon Onslow-Ford, quién lo estimula a pintar. En ese mismo año toma contacto con surrealistas que le aportan las ideas sobre la creación de un arte regido por el automatismo psíquico y este las adhiere en su pintura. A estas alturas ya había sido incluido como miembro del movimiento y había sido invitado a exponer en distintas exhibiciones.
Durante 1938 Matta se traslada a los Estados Unidos donde permanece hasta 1948 y es en este período en donde cambia del dibujo al óleo y por el cual se hace muy famoso, en 1939 ingresa a los círculos artísticos de Nueva York en donde se encontraba Marcel Duchamp y Tanguy, obteniendo la aceptación entre los jóvenes Pollock, Motherwell y Gorky, que eran los representantes de la vanguardia norteamericana. Lo que lo convirtió en el exponente inspirador del movimiento expresionista abstracto en Norteamérica.
Durante esta época destaca que la pintura en sus obras asombraba por su gran formato y repetía las representaciones de volcanes y terremotos bajo el tema de la creación cósmica del Universo.
Para 1948 el artista rompe su influencia con el movimiento surrealista y decide volver a Europa pero antes vuelve a Chile para exponer en la Galería Dédalo y publicar un texto llamado “Reorganización de la Afectividad”.
La Brigada Ramona Parra es el nombre que recibe la brigada muralista del Partido Comunista de Chile (PCCh) y del cual Matta era miembro. Dentro de sus obras, e inspirado por la idea de un arte revolucionario se encuentra el Mural titulado El primer gol del pueblo chileno VIDEO de la Brigada Ramona Parra en la comuna de la Granja, realizado en 1971 donde trabajó con decenas de jóvenes en la ejecución de murales colectivos.
Para 1957 se realiza una gran retrospectiva de su obra en el Museo de Arte Moderno de Nueva York.
Mientras que en 1959 es reincorporado al movimiento surrealista, dos años después viaja a Chile para realizar el proyecto del mural “Vivir Enfrentado a las Flechas”, en la Universidad Técnica del Estado, hoy Universidad de Santiago (USACH).
En 1970, el Museo Nacional de Bellas Artes le da su nombre a la gran sala subterránea, inauguración en la cual contaron con su presencia, sala que más tarde cambiaría su nombre de “Sala Matta” durante el régimen militar puesto que la administración del museo era afín al golpe.
En su obra pictórica está comprobada la existencia de una continua evolución que se presenta en las características constantes en el tiempo, así como en la concepción espacial de la tela.
La organización de las figuras reconocen un centro dinámico, centrífugo y expansivo a la vez, que se proyecta hacia los extremos y límites del cuadro.
Su universo imaginario entremezcla las teorías sobre el tiempo y el espacio concebidas por la física moderna, la filosofía humanista, la lucha del hombre por la libertad y la amenaza de los poderes indeliberados. Sus obras siempre sorprendentes por su fuerza creativa como chileno y latinoamericano, con un gran sentido lúdico y humorístico. En su obra imprimió su manifiesta inquietud por temas metafísicos y religiosos.
Éstas obras son destacadas piezas de colección que el artista recurrió a crear bajos distintos medios de expresión, llegando a convertirse en esculturas, piezas de cerámica, objetos de diseño y decoración, mosaicos, muebles y arte digital.
En la obra Allende de la muerte a la vida, nos encontramos claramente con dos bandos, uno en ofensiva y otro a la defensiva, una situación de combate en donde ambos frentes son divididos por una masa tramada y desprolija de cuerpos, extremidades, puños, pies y manos unidos por un amago de cuerdas blancas y rojas. En la trama los cuerpos se atochan unos sobre otros hasta llegar hasta un bosquejo de líneas expansivas como un intento de chispas en el cielo.
Con una gama muy acotada de colores los cuales tienen mucho que ver con los colores representativos de la bandera chilena. La gama de los rojos, azules y blancos tienen una fuerte significancia en la valorización de su pintura por el hecho de ser política y abordar el tema de la dictadura justo mientras ésta se gestaba
.
El negro evidencia la oscuridad, el bando maligno, mientras que el azul es la esperanza y el bando libertador en defensa del pueblo, en la parte inferior del cuadro se representa un mar de sangre derramada por los militares,
En contraste siempre se mantienen a estas maquinarias representadas con tonos grises y negros el celeste azul del cielo y los cuerpos desmembrados que se vislumbran con tonos magenta y rojos carmín. Todo aquello que exhala este cuadro es relacionado a la ofensiva militar y la dictadura, principalmente a la pérdida de los derechos y de la libertad.
Su veladura no es usada en todo el cuadro, se pueden encontrar claros puntos en donde el color es rico y denso, en contraste con el difuminado de otras áreas en donde la pintura pareciera ser en aerosol, muy leve y traslucida, cómo una capa casi imperceptible incluso con el blanco. Sus formas transfiguradas son el claro atractivo de esta pintura, el tipo de formas abstractas y surreales, demuestran su imaginario caótico sumado a la carga sentimental
La muerte de Salvador Allende es y siempre será una especie de incógnita en la historia de Chile, dejando como evidencia que hace no más de un año que se viene a saber que Allende no se suicidó como se quiso asegurar en un principio. Existen por coincidencia muchas partes de la misma historia y lo más importante es que durante el período de la dictadura en Chile no hubo misericordia ni piedad.
Es importante mencionar que Matta retorna a Chile en el año 1970 con el propósito de la candidatura y triunfo de Salvador Allende, según palabras del pintor “Allende es ir más allá, e ir más allá significa la gloria”. El artista demostró en variadas ocasiones su afinidad con un pensamiento político de izquierda socialista y que luego del golpe de Estado del 11 de septiembre de 1973 se distanció por completo de Chile, para 1974 el pasaporte de Matta fue anulado.
Cómo se puede ver en la pintura existe una fuerte iconografía bélica que se deja ver en la esquina superior derecha con la imagen de tanques de guerra y ametralladoras, su figuración abstracta y transmutada nos da destellos de imágenes conocidas que de algún modo entregan un tipo de referencia a la violencia bélica, la presencia de cascos, tambores de metal, armas, escudos y la pequeña estrella que se encuentra a un costado del tanque deja entrever “MAD USA” con una clara declaración en contra del gobierno de los Estados Unidos, que tuvo un papel fundamental en los golpes de estado de los países latinoamericanos y africanos. Es por esto que la presencia e intervención norteamericana para Matta en el conflicto político chileno constituiría una locura por inmiscuirse de la manera tránsfuga en que Nixon lo hizo, entonces la palabra en inglés “mad” que significa loco y con la que designa al país anglosajón describe perfectamente la claridad crítica en su ataque con justificación y fundamentos. El lúcido poder de la verdad utilizado como método de tergiversación de la realidad política.
Esta obra se puede comparar directamente con la obra temprana de 1941 titulada “Años de miedo” , óleo sobre lienzo perteneciente al Museo Guggenheim que proyecta muy bien el caos y la desesperación en un ambiente nebuloso y cambiante, lleno de movimiento y tonos difuminados y manchados. Así mismo podríamos encontrar ciertas similitudes con la obra en honor al ex-presidente de Chile, y que constata muy bien el tiempo ambiguo y las inseguridades de una época histórica cargada por la indefinición de un sentimiento muy relacionado al miedo y a la incertidumbre. El miedo a perder la vida o a los seres queridos, la falta de recursos y la fuerte represión citadina, hace de este cuadro una fuerte evidencia de los colores y formas, además del sentimiento expresado, la emoción de un suceso encapsulado en las formas que existieron en ese período oscuro de la historia de Chile.
Bibliografía
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